Sí, posiblemente hoy vas a tener lo que todo el mundo llama «un día de mierda»; tus vacaciones han terminado, está lloviendo, tienes la bandeja de correo electrónico a rebosar, has dormido poco, todavía tienes secuelas del atasco de ayer, tu pareja está de mal humor porque también ha decidido tener un mal día, y cualquier recuerdo de los días pasados hacen que tu día se torne gris.
Teniendo en cuenta que un alto porcentaje de la población ha estado de puente o ha tenido cuatro días de merecido descanso y que muy probablemente estén dispuestos a tener un «mal día»…¿qué hacemos? ¿Apagamos el mundo y nos bajamos en marcha de nuestra vida o afrontamos nuestro día y nos dedicamos a vivir?
A mí se me ocurre algo mucho más divertido que resignarme a tener un «mal día»,no vaya a ser que este mal día se convierta en una mala semana y no pueda dedicarme a vivir…
Por qué, ya que has decidido que tu día sea una mierda, ¿no tratas de mejorar el día de la gente que te rodea? Suena demasiado solidario verdad, ¿lo intentamos?
Por qué en vez de llegar al trabajo, mirar a tus compañeros y pensar en lo bien que estabas ayer disfrutando de tu vida, no tratas de animarlos diciendo que hoy será un gran día y que seguro pasará volando. Incluso les puedes invitar a desayunar! ¿Qué locura verdad?
Por qué cuando tu pareja se levante y te diga que parece tener las mismas ojeras que alguien que sale de un after bien entrada la mañana, no te levantas le miras a la cara y espetas algo como: «cariño para mí con o sin ojeras siempre estarás preciosa» verás como su día comienza de otra manera.
Por qué cuando hoy vayas en transporte público y te encuentres con las caras más tiesas que has visto en años no tratas de buscar esa sonrisa que seguro alguien necesita, o por qué no te mueves unos centímetros para que la gente entre o salga, o por qué no cedes tu asiento a esa señora que te mira con ganas de «comerte», o por qué no das los buenos días al conductor antes de bajarte del autobús, sí la sorpresa de su cara merecerá la pena…o más sencillo aún por qué cuando te choques con alguien no pides disculpas, de forma sincera, esbozando tu mejor sonrisa.
Por qué a cada foto que tus «amigos sociales» suban a sus redes lamentándose de lo duro y largo que será su día, tú no les respondes con una crítica del estilo: » la única forma de que tu día mejore es que tú quieras que mejore», lo mismo recibes algún insulto, es el precio que hay que pagar.
Por qué no llamas a tus amigos y os tomáis esa caña que lleváis posponiendo meses, lo mismo les puedes alegrar el día, o quién sabe, lo mismo son ellos los que te lo arreglan a ti.
Por qué no empiezas a correr hoy. Llevas meses queriéndolo hacer, tu día va a ser una mierda de todas formas, ¿Tienes miedo a intentarlo?
…
Sí, hoy puede ser un mal día, de hecho puede ser el peor día de tu vida si te lo propones.
Por qué no cambias pequeñas cosas, por qué no te centras en transformar tu «mal día» por otro «gran día», por qué no tratas de ayudar a mejorar el día de la gente que te rodea.
Cada pequeño cambio cuenta, haz que cuente para los demás y seguro que empezará a contar para ti.
#losmalosdíasexistensitulesdejasexistir.
Photo credit: instagram.com/luismartingarcia
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