Me encantaría que me demostraras lo contrario, tendrás tu momento, ahora deja que sea yo el que argumente:
Llevas años con tu pareja, lo que en un principio fue novedad y curiosidades se ha transformado en costumbrismo y monotonía. Vives cada día con él/ella como si fuera la copia del anterior, no cambias nada, no haces nada diferente. Vivís los mismos momentos juntos desde hace años, viajáis juntos a los mismos destinos, dormís en el mismo colchón de siempre, tenéis el mismo sexo de siempre, pero tú, no haces nada, no te atreves a cambiar por miedo a qué pensará ella…no cambies, se terminará yendo…
O tal vez, estés soltero, entrando y saliendo de relaciones de las que no sientes ningún orgullo, viviendo algo que no es para ti y que todo el mundo desea. Viviendo solo pero acompañado, viviendo con todo el mundo y con nadie a la vez…y tú, no sabes cómo cambiar, no sabes por dónde empezar…
Llevas años en el mismo trabajo, quizá demasiados años desde la última vez que te atreviste a planteártelo. Asentado sobre un contrato fijo, sobre una estabilidad económica y un seguro privado. Soportando un entorno que te desmotiva y que hace que tus capacidades se estanquen. Atrofiándote en una silla, aporreando un ordenador sin pararte a pensar qué es lo que estás haciendo, generando valor para la empresa que hoy paga tus facturas…y tú necesitas cambiar, necesitas una nueva actividad, necesitas volver a trabajar en ese proyecto que te quema por dentro, necesitas sentirte realizado…y no, admítelo, no estás dispuesto a cambiar…
O tal vez estés cansado, cansado de enlazar un trabajo con otro, de realizar prácticas en departamentos totalmente dispares, de coger becas o de aceptar trabajos mal remunerados. Cansado de viajar, cansado de no saber en qué ciudad o en qué país estás. Cansado de no saber qué responder cuando alguien te pregunta en qué ciudad vives o incluso, cansado de no saber de dónde eres. Cansado de una inestabilidad que muchos encuentran atractiva pero que solo unos elegidos pueden acostarse con ella. Cansado de no poder planear nada hasta 48 horas antes. Cansado de exprimirte para trabajar sin saber qué tienes que hacer para parar…
Por otro lado, follas poco y lo sabes. Siempre defendiste que a ti no te pasaría pero te está pasando. Te escudas en que trabajas demasiadas horas, en que tienes responsabilidades que no puedes evadir, en que no conoces gente nueva, en que a tu pareja le duele la cabeza…y tú sigues sin cambiar, y sí, sigues follando poco…
O tal vez, folles demasiado, has entrado en una dinámica en la que el sexo ha dejado de ser un deseo para ser una obligación, cambiarías noches de placer con desconocidos por un zumo recién exprimido en la cama, cambiarías noches sin dormir con personas cuyo nombre te cuesta recordar por noches de cine en las que el nombre de la película es totalmente irrelevante. Y tú sigues sin cambiar…acojonado al buscar lo que realmente quieres encontrar. Viviendo una vida que tus amigos pagarían por vivir…pero esa vida te cansa, y sí, tú sigues dejándote llevar.
Llevas una vida sedentaria, recuerda, hace años te prometiste hacer deporte. Esa promesa hace que bajes la cabeza cada vez que adelantas a un grupo de ciclistas dejando 1,5 metros de separación que es lo único que, hasta hoy, sabes de ciclismo. Es la que hace que te sientas un auténtico despojo cuando bien entrado el domingo ellos se preparan para afrontar una dura prueba, pongamos que es una carrera, y tú te preparas para afrontar tu resaca…y sigues diciendo que mañana empiezas, pero no estás dispuesto a empezar…
O tal vez hayas llegado a tu límite, no solo físico sino también mental, cansado de entrenar cada día, cansado de aguantar dolores que cada día se van agudizando. Cansado de competir cada fin de semana envidiando a quién se acuesta cuando tú te levantas… Pero no puedes parar, todavía crees que puedes más...
No te gusta lo que ves en el espejo cada mañana al salir de la ducha, no te gusta en qué se ha convertido ese cuerpo que un día prometiste cuidar. No te atreves a mirar a esa barriguita que ayer nació y hoy está cerca de graduarse. Y tú seguirás sin actuar, seguirás sin cuidarte y seguirás sin cambiar…
O quizás, estés cansado de medir, cansado de contar cada caloría que ingieres, cansado de privarte de esa copa que tu cuerpo no sabrá asimilar, obsesionado con cuidarte y con entrenar pero no, no te lo vas a permitir vas a seguir contando tu vida…
Te sientes solo, cada día te cuesta más buscar un plan, tu entorno ha desaparecido. Has dejado que ellos salieran de tu vida sin retener a los que realmente querías a tu lado. Te encuentras solo porque decidiste que ese día tu trabajo era más importante que ellos, y sí, después de ese día vinieron todos los demás…elegiste que él o ella necesitaba más tiempo que ellos incluso, que tú mismo, y hoy él/ ella no está y ellos tampoco… Y no, no sabes cómo volver atrás, no puedes recuperar lo perdido…
O tal vez tu círculo de amistades esté creciendo tanto que no puedes gestionarlo, quieres estar en todos los sitios y con todo el mundo y al final sientes que no estás en ninguno, conoces gente en todos los lugares donde vas, da igual el bar, la ciudad o incluso el país, tanta gente te agota, la única forma de encontrarte es con tu núcleo más cercano, núcleo que hoy ya no sabes dónde encontrar…
Admítelo, no siempre puedes ser feliz.
Valora lo que tienes y lucha por lo que quieres, la formula de la felicidad no debe ser tan compleja…
Menuda mierda para mentes blandas
Vivan las mentes blandas entonces! Gracias por tu comentario. Un saludo
Pepe. El post está muy bien aunque si hubiera sido un poco más breve la idea hubiera impactado más. Fijate en los post de Isra. El pone muchas frases cortas en sus post sobre motivación y eso le da más fuerza al contenido. La idea es buenisima creeme y el post está bien. Ya estoy deseando leer algo del tal Ray a ver si te puede superar. Un saludo
Buenas Delfina! Ya sabes, cada uno tiene su punto de vista y cada uno tiene su forma de escribir, lo bueno de la red es que todos tenemos nuestro sitio. Hacerlo mejor o peor depende de cada uno. Muchas gracias por tu comentario. Siempre viene bien otro punto de vista! Un saludo
Te veo fatal, se notaba claramente que necesitabas unas vacaciones ;P
Estrés nunca Manuel! 😉