Róbame, róbame un día, una noche o un finde sin dormir, róbame un beso, un abrazo, una caricia, un masaje o un polvo con final feliz.
Róbame una sonrisa porque ten claro que yo te robaré la tuya, o mejor, haré que esta no la pueda robar nadie.
Róbame mi tiempo porque no hay nada que valga más y que cueste menos perder.
Róbame un adiós que no sea definitivo y se convierta en un hasta pronto.
Róbame una lágrima que nunca derramé mientras observaban pero en la que sólo tú y yo comprendimos qué significaba.
Róbame un café y un libro en una tarde atormentada.
Róbame mi ropa, mejor, haz lo posible porque por nadie más sea robada.
Róbame todo lo que tengo, porque de nada vale tenerlo si tú no puedes disfrutarlo.
Róbame una vida porque mañana será demasiado tarde para vivirla y alguien ya la habrá robado.
Róbame…